sábado, 15 de mayo de 2010

Esto está bueno

De vez en cuando salen discos que me ponen contento. Me refiero a lo siguiente: no sé si son obras maestras, no sé si alguien más los escucha, no sé si van a quedar en la historia, a generar el culto de diez gatos locos o a gozar de la total intrascendencia. Pero son álbumes que me dibujan una sonrisa en la cara ni bien los escucho por primera vez.
Este es uno de esos. Una escucha, una sonrisa.

Cuando una leyenda viva del rock graba con una de las bandas que más te gusta del rock angloparlante, está claro que algo bueno va a suceder. Y que Roky Erickson haya hecho un disco con Okkervil River es groso. Está buenísimo. Okkervil River, quizá el grupo que mejores melodías ha creado en los últimos años, se junta con uno de los hombres clave de la psicodelia, un sobreviviente que las pasó todas y que muchos creían que estaba muerto.

Pero este excelente disco -climático y psicodélico, con pasajes rockeros y folk- demuestra que si Erickson está muerto, nosotros, los demás, estamos directamente enterrados. Emociona su voz curtida. Queda claro que esa voz sabe.

Escuché True Love Cast Out All Evil una sola vez. Sí, una sola, pero me alcanza para afirmar que va a ser uno de los lanzamientos del año. Y para que lo vayamos escuchando juntos, lo dejo para el que lo desee conocer... Se va la segunda.

Y qué lindo sería que lo editen por acá, ¿no?

10 comentarios:

Pablo Libre dijo...

Uno de los tipos que más admiro, y uno de lospocos músicos que pudo sacar cosas buenas después de cumplir 50, sin aburguesarse. Aguante el electroshock!

Dante dijo...

parece fontanarrosa

Martín dijo...

¡Pero qué discazo, la puta madre! Hace tiempo que no escucho algo tan bueno, tan interesante.
Muchísimas gracias.
Abrazo,

Martín

santiago segura dijo...

Aguante, Pablo!... Este sí que las pasó todas.
Te recomiendo un tal Bob D. también!

Dante, no me imagino al negro cantando así, pero sí, se parece!

Bueno Martín, te entusiasmaste más que yo! Voy a darle play de vuelta para reconfirmar lo bueno que está.



Salud!

Polanesa dijo...

Ufff, me costó entrar en estos días. Siempre se me trababa todo. Después de varias veces, estuve a punto de resignarme, pero por suerte no lo hice. Mencantó.

Darío dijo...

Tucho, sos groso, sabelo.
No puedo con la ansiedad; voy por la voladura de cabeza folk pop "Goodbye Sweet Dreams" y ya te digo que es un disco increíble.

Este es rutero en serio.

Ya terminó... "Be and Bring Me Home" y su pianito inicial. Genial

saludos!

Roedor dijo...

Che, ¿puedo ser tan salame o distraído que no me pareció gran cosa? Me pareció como que se quedaban en buenas ideas sin concretar. No esperaba a los 13th Floor Elevators, obviamente (que me gustan mucho), pero honestamente, y más después de leer estos elogios, voy a escucharlo de nuevo y ver qué onda.

Igualmente me sirvió para desenterrar algunos discos de los Okkervil River que tenía olvidados en algún lugar del disco rígido. Ahora estoy escuchando The Stage Names, que está excelente.

Roedor dijo...

Lo escuché entero, de nuevo, parece mentira cómo cambian las cosas según el mood del momento en que uno lo escuche. La vez anterior estaba con mil quilombos, haciendo 40 cosas y con alguna que otro asunto para resolver de urgencia.

Ahora lo escuché como debe escucharse, sin hacer otra cosa, y me gustó muchísimo más, pero además de la composición de 2/3 canciones y la interpretación de Erickson, la banda suena muy loca y densa por momentos, como una especie de Wilco fuera de control. No sé si disco del año, pero está muy bueno. Conmueve saber (como leí por ahí) que la intro y la outro fueron grabadas caseramente en la prisión, y luego "comentadas" por la banda en el estudio. Muy lindo.

santiago segura dijo...

Qué se te trababa, Pola? Algo del blog? Cómo andás tanto tiempo?

Darío, no sé si es un disco increíble pero me pone de muy buen humor, y con eso por ahora alcanza, creo.

A cuál de los dos Roedores le contesto? Un poco a cada uno:
1- No sé si es un disco grandioso, pero me gusta por eso. Lo que digo al comienzo del post es lo que vale, entra en esa categoría de discos que no sabés si es genial o qué, pero a vos te hacen bien.
2- SIEMPRE cambia la opinión de un disco cuando lo vas escuchando mejor, y eso de las situaciones que comentás, es muy cierto. Paradójicamente, a mí me gustó desde la primera escucha y creo que fue similar a la tuya, medio enquilombado.
3- The stage names es un discazo, ese sí me parece indiscutible.
4- Lo que decís en el último párrafo sintetiza perfecto al disco, siento que los OV se ponen el traje y tocan "para él", y queda muy bien.



Saludos!

Roedor dijo...

Sí, eso de la circunstancia cuando uno escucha es importante. A mí me gusta Genesis desde que compré mi primer disco de ellos, "Foxtrot". Recuerdo cada detalle de la tarde en que lo compré, cómo estaba el día (fresco y ligeramente lloviznoso), y cómo me gustó. Me bastó una sola escuchada para hacerme fan de ellos. Pero con otros me ha pasado lo contrario.